Armenia recibió petróleo de Azerbaiyán

El gobierno de Pashinian no ceja un instante en la reconfiguración de las relaciones políticas y económicas internacionales, aumentando la dependencia armenia de Azerbaiyán, Turquía y Occidente.

Redacción NOR SEVAN

Hoy, en sus redes sociales, el ministro de Economía de Armenia, Guevorg Papoyan, escribió: “En estos momentos, por la frontera Armenia-Georgia (Estación Ayrum) está cruzando una formación que trae en sus 22 vagones 1.300 toneladas de gasolina A95 de origen azerbaiyano, que llega a Armenia por la vía férrea Azerbaiyán-Georgia-Armenia”.

“Quizás, esta sea no sólo la primera transacción comercial entre Armenia y Azerbaiyán después de la paz establecida entre ambos, sino también la primera transacción comercial entre Armenia y Azerbaiyán desde la independencia de ambas”, escribió el ministro.

Ayer, en Bakú, la empresa petrolera azerbaiyana Socar informaba sobre el envío de la primera partida de gasolina de Azerbaiyán a Armenia.

“Según el acuerdo alcanzado el 28 de noviembre, en Gabala, entre el viceprimer ministro de Azerbaiyán, Shahin Mustafayev, y el viceprimer ministro de Armenia, Mher Grigorian, hoy se enviará gasolina de la marca AI-95, producida por SOCAR, en una cantidad de 22 vagones”.

También informó que la exportación tenía un carácter exclusivamente comercial, que la gasolina se vende a precios que corresponden al nivel del mercado internacional y que las condiciones de venta y las tarifas de suministro se determinan por acuerdos comerciales entre los participantes de la transacción.

Este es otro frente en el cual el gobierno de Pashinian sigue avanzando de acuerdo a lo acordado con quienes elaboraron su plan de gobierno de entrega y sumisión, y lo condujeron al poder en mayo de 2018.

La entrega de Artsaj/Karabaj, la separación de Armenia de Rusia, la entrega de Meghrí al control estadounidense, la intromisión de la Unión Europea en los quehaceres y posicionamientos cotidianos de la república, la sumisión política a las exigencias de Bakú y Ankara, la entrega de territorio soberano armenio y de las riquezas naturales, la destrucción sistemática de los valores culturales y las tradiciones históricas que hacen a la identidad armenia, el ataque a la Iglesia Apostólica Armenia y la división de Armenia de las comunidades de la diáspora, son algunos de los “éxitos” del gobierno de Nikol Pashinian, que llevó a Armenia y su pueblo a un nivel de aislamiento e inseguridad que pone en riesgo la existencia futura del Estado y de la identidad nacional.