"Artsaj nunca será parte de Azerbaiyán", afirmó la cancillería de Karabaj en una declaración oficial
Al cumplirse el primer año del cese de fuego, el pueblo de Artsaj reafirma su decisión y se mantiene fiel al principio del derecho de autodeterminación de los pueblos.
Redacción NOR SEVAN
El Ministerio de Relaciones Exteriores de la República de Artsaj emitió una declaración hoy, 9 de noviembre, en el primer aniversario del fin de la Guerra de los 44 días.
A continuación, publicamos el texto completo de la declaración.
“Hace un año, el 9 de noviembre de 2020, gracias a los esfuerzos activos de mediación de Rusia, el Presidente de la Federación de Rusia, el Primer Ministro de Armenia y el Presidente de Azerbaiyán firmaron una declaración trilateral. La firma de la declaración trilateral permitió poner fin a la guerra de agresión de 44 días desatada por Azerbaiyán contra Artsaj -con la participación militar directa de Turquía, así como de terroristas internacionales y mercenarios de Oriente Medio-, sentando las bases para la entrada en el territorio de Artsaj de las fuerzas rusas para el mantenimiento de la paz en la zona del conflicto entre Azerbaiyán y Karabaj. La declaración trilateral también desempeña un papel importante para garantizar la rehabilitación de la República de Artsaj después de la guerra.
Como resultado de la agresión y la guerra devastadora que duró 44 días, Azerbaiyán ocupó importantes territorios de la República de Artsaj, incluida la ciudad de Shushí, centro histórico y cultural de Artsaj. Durante las hostilidades, el ejército azerbaiyano cometió numerosos crímenes de guerra, incluidos ataques deliberados contra bienes de carácter civil, tortura y ejecuciones extrajudiciales de prisioneros de guerra y civiles capturados, depuración étnica, destrucción deliberada de iglesias e monumentos históricos y culturales, uso indiscriminado de armas prohibidas por el derecho internacional.
Incluso después de la firma de la declaración trilateral el 9 de noviembre de 2020, Azerbaiyán no detuvo sus actos internacionalmente ilícitos y continuó sus acciones ofensivas y agresivas, incluida la captura de personal militar y civiles, la realización de asesinatos deliberados, la destrucción de iglesias armenias y el patrimonio cultural en los territorios ocupados.
En este sentido, cabe destacar que la situación derivada del uso ilegal de la fuerza militar por parte de Azerbaiyán, la flagrante violación de sus obligaciones internacionales, las violaciones sistemáticas y masivas de los derechos humanos y el derecho internacional humanitario, no pueden servir de base para la solución del problema y del conflicto entre Azerbaiyán y Karabaj.
Es bien sabido que las normas del derecho internacional prohíben el reconocimiento de incorporaciones territoriales como resultado de la amenaza o el uso de la fuerza. Además, el uso de la fuerza no puede abolir uno de los principios fundamentales del derecho internacional, la igualdad de derechos y la autodeterminación de los pueblos, consagrados en la Carta de las Naciones Unidas y otros documentos internacionales fundamentales.
La posición oficial de Stepanakert y la voluntad del pueblo de Artsaj permanecen sin cambios. Artsaj nunca será parte de Azerbaiyán. El respeto del derecho inalienable a la libre determinación realizado por el pueblo de Artsaj y la desocupación de los territorios donde creó y desarrolló su Estado independiente mediante su libre determinación, son la piedra angular de una solución integral del conflicto Azerbaiyán-Karabaj y del establecimiento de una paz sostenible y duradera en la región".
