La iglesia y la situación política en Armenia

En la Santa Sede de Etchmiadzin se realizó ayer una reunión de los obispos presidida por el Patriarca y Catolicós Karekin II.

Redacción NOR SEVAN

"Al discutir los desafíos que enfrenta nuestra patria y nuestro pueblo, expresamos nuestra profunda preocupación por una serie de eventos reprobables en la vida política interna de Armenia, en este período de elecciones parlamentarias anticipadas", señalaron los obispos armenios reunidos Santa Sede de Etchmiadzin. El encuentro de los clérigos fue presidido por Su Santidad Karekin II, Patriarca Supremo y Católicos de todos los armenios.

A través de una declaración publicada por la oficina de prensa de la Santa Sede, aseveraron: "Desde el primer día de la campaña electoral del 7 de junio, el discurso de odio, las expresiones difamatorias e insultantes, el juramento, la venganza y la violencia, lamentablemente, pueden poner a nuestra sociedad en una situación que inevitablemente se convertirá en intolerancia". "Choques civiles sobre el terreno no tienen justificación, todos los pasos que dividen y agobian a nuestra sociedad, que aún no ha curado los dolores de la guerra, son condenables. Es una verdad indiscutible que la mala semilla nunca puede dar buenos frutos, pero toda casa dividida en sí misma debe permanecer en pie (Mateo 12:25)", advirtieron los obispos armenios.

Asimismo, manifestaron que "el futuro de la patria está sobre la mesa". "Es necesario mostrar patriotismo, celo y perseverancia en el desarrollo de una visión común de nuestro pueblo alrededor de la Patria, para que todos consideren un honor inclinarse bajo el yugo de la realización de esa visión", agregaron.

En este sentido, Etchmiadzin hizo un llamado a todas las fuerzas políticas, incluido al partido gobernante, "a que se abstengan de hablar y comportarse de manera inapropiada". "Nuestro pueblo, que ha creado una rica cultura milenaria y altos valores, no es apto para tales manifestaciones, que degradan nuestra imagen y crédito nacional. No sean sembradores de maldad, no se dejen tentar por comportamientos inaceptables para nuestro pueblo cristiano", advirtieron.

Por último, realizaron una plegaria: "Oramos para que el Señor, bajo la protección de Su Sagrada Mano Derecha, mantenga a nuestro país en paz, dando sabiduría a todo nuestro pueblo para crear su futuro en un ambiente de amor y solidaridad".