La TV Pública de Armenia se negó a emitir el mensaje de fin de año de Su Santidad Karekín II
Por primera vez en 32 años de historia de la Tercera República de Armenia, el principal canal de televisión del país decidió, sin ningún tipo de justificación, no transmitir el mensaje de Año Nuevo de la máxima autoridad religiosa de la Iglesia Apostólica Armenia.
Redacción NOR SEVAN
La Compañía Pública de Televisión de Armenia, TV1, se negó a transmitir el mensaje de Año Nuevo de Su Santidad Karekín II, máxima autoridad religiosa de la Iglesia Apostólica Armenia, cuya sede se encuentra en la ciudad de Echmiadzín, República de Armenia.
Esta decisión produjo una catarata de fuertes críticas contra el gobierno liderado por Nikol Pashinian, no sólo en distintas regiones del país, sino también en las comunidades armenias asentadas en los cinco continentes.
El mismo 31 de diciembre, desde la Santa Sede de Echmiadzín informaban que “desafortunadamente, tendremos que afrontar un acontecimiento desagradable” y explicaba que por primera vez en los 32 años de la Tercera República de Armenia no se iba a transmitir el mensaje de fin de año del Patriarca Katolicós de la Iglesia Armenia.
“Este año, a última hora, la Empresa Pública de Televisión informó, sin ningún motivo, que el mensaje de Año Nuevo de Su Santidad no se transmitirá antes de la medianoche, como era tradicionalmente habitual. En cambio, se propuso presentar el discurso del Patriarca de todos los armenios durante la edición vespertina de noticias, que la Santa Sede rechazó”, dice la declaración oficial difundida desde Echmiadzín.
“Esta es otra manifestación del cinismo de Nikol Pashinian”, aseguró el sitio de noticias Oragir.
La diputada Lilit Galstian, de la opositora Alianza “Haiastán” no pudo ocultar su enojo y enfatizó: “Incluso hacen que los recordemos con palabras de disgusto y maldiciones hasta los últimos segundos del año”. “No se puede ser tan repugnante, tan despreciable, tan mezquino, tan ingrato, tan hostil, tan descarado, tan inmoral, tan destructivo... La televisión pública se negó, sin ningún motivo, a transmitir el tradicional mensaje de Año Nuevo de Su Santidad Karekín II. ¿Pero quién le dio a nuestro canal de televisión, financiado con fondos públicos, el derecho de insultar y faltarle el respeto a todo el pueblo cristiano armenio?”, preguntó públicamente la diputada Galstian.
Hasta el momento, Hovhannés Movsisian, director ejecutivo de la TV Pública de Armenia, no habló ni explicó las razones de tal decisión. Tampoco el canal difundió una declaración oficial con los motivos de la negativa de difundir el mensaje del Patriarca armenio.
En su mensaje, que finalmente fue difundido por las redes sociales y por los sitios de noticias, Karekín II destacó que “el Año Nuevo es el límite entre los días que se han convertido en historia y el futuro esperanzador”.
“Recibimos el año 2024 con profunda preocupación, con el dolor en nuestros corazones por las enormes pérdidas sufridas. Vivimos un año difícil, pero confiando en el Señor, miramos hacia el futuro de nuestra nación con esperanza y optimismo. A pesar de la ocupación y despoblación de Artsaj, la grave situación creada en torno a Armenia y los problemas existentes, superaremos con firmeza las dificultades, manteniendo fuerte la devoción y el amor por nuestra patria y la fe en nuestro Señor Todopoderoso”, subrayó el líder espiritual armenio.
En otro párrafo de su mensaje, Karekín II dijo que “somos herederos de una nación que fue perseguida y sufrió, pero no se rindió; que vivió un genocidio, pero no desapareció; que fue provocada, pero no murió. Por eso, la historia de un pueblo plagada de maravillosos testimonios de piedad y patriotismo, con un deseo incesante de vivir y crear, no puede ser interrumpida. A menudo, los pueblos son sometidos a distintas pruebas de vida, enfrentando con valentía las dificultades y los desafíos. Y logran salir victoriosas aquellas naciones que permanecen indomables en espíritu y en su fe en Dios”.
El Katolicós de todos los armenios instó al pueblo a que “en el nuevo año, renovémonos en espíritu y mente, fortalezcamos la esperanza, reflexionemos autocríticamente sobre los procesos que vivimos y sobre nuestras acciones, corrijamos las deficiencias y los errores, no permitamos que el odio y la división sean sembrados en la vida nacional, y echen raíces el espíritu destructivo y la indiferencia”.
"Seamos conscientes de que la patria es el único lugar sagrado donde se guardan las oraciones y los sueños de las generaciones armenias de todos los tiempos, donde se seguirá formando la identidad armenia y cuya tierra sagrada nutrirá la fortaleza del pueblo armenio", puntualizó el líder religioso armenio, convocando a "rodear de amor a nuestras hermanas y hermanos que fueron desplazados por la fuerza de Artsaj, mantengamos viva en ellos la esperanza para que el sueño de regresar a su tierra natal nunca se desvanezca y la fe en Dios permanezca fuerte. Apoyemos a los necesitados y angustiados y busquemos la ayuda del Altísimo para nuestros jóvenes desaparecidos, capturados y sus familias”.
Karekín II finalizó su mensaje pidiendo “orar desde lo más profundo de nuestro corazón para que el Señor brinde paz a los armenios y a toda la humanidad”.
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