Organización británica HALO Trust acusada de espionaje en favor de Azerbaiyán

Otra de piratas... Como a lo largo de la historia, Occidente y su maquinaria al servicio de Azerbaiyán y Turquía, perjudicando a Armenia y pisoteando los derechos históricos del pueblo armenio.

Por Adrián Lomlomdjian

La organización británica HALO Trust, dedicada a actividades caritativas en Artsaj, entregó a los servicios especiales turcos un mapa de los territorios minados de la región, lo que le permitió a las fuerzas agresoras superar con éxito los campos minados defensivos del Ejército de Defensa de Artsaj durante los 44 días que duró la reciente guerra desatada por Azerbaiyán contra el pueblo de Karabaj. Así lo afirmó uno de los asesores del presidente de Artsaj, Boris Avakian, durante una entrevista a "24News".

"Supe de fuentes fiables que HALO Trust, actuando bajo el nombre de una organización benéfica británica y llevando a cabo, entre otras actividades, la remoción de minas, recibió mapas de los campos minados del lado armenio durante su trabajo en Artsaj y los entregó a los servicios especiales turcos. Por lo tanto, durante la guerra, el enemigo pudo atravesar con éxito áreas minadas. Con el pretexto de estudiar áreas peligrosas, esta organización llevó a cabo trabajos de reconocimiento en todo el territorio de Artsaj. Esta organización fue fundada en 1988 por Colin Campbell Mitchell, miembro del Parlamento británico y ex miembro del ejército británico", destacó Avakian.

En su muro de Facebook, la diputada opositora Naira Zohrabian, del Partido Armenia Próspera, dijo que a partir del triunfo de la "revolución de terciopelo" las redes de espionaje occidentales intensificaron su presencia y actividades en Armenia y Artsaj. "Los espías extranjeros, junto a los locales, fueron minando nuestro sistema de inmunidad y debilitando la seguridad de los dos Estados armenios", enfatizó Zohrabian.

"Resulta difícil de creer que las autoridades armenias no estuvieran al tanto de esto", dijo la diputada, a quien le resulta llamativo que justamente ahora denuncien las verdaderas actividades de estas organizaciones internacionales.

Zohrabian acusó a los gobiernos y a lo servicios de inteligencia de Armenia y Artsaj de estar más ocupados en perseguir opositores que en garantizar la seguridad de los Estados armenios y del pueblo. "Convirtieron el país en un trampolín para los espías internos y externos. Y tarde o temprano, responderán por ellos", afirmó.

Por su parte, y tal como era de esperar, HALO Trust negó las acusaciones de espionaje en Nagorno Karabaj a favor de los servicios de inteligencia turcos.

"HALO Trust está familiarizado con las acusaciones de que durante la guerra de Karabaj en 2020 o antes de la guerra, entregó mapas de campos minados a las fuerzas turcas. Durante más de 20 años, HALO Trust trabajó en Karabaj para hacer que la vida de la población local sea más segura. HALO Trust solo puede operar en zonas de conflicto alrededor del mundo porque es una organización neutral y no politizada. Esta acusación es una mentira absoluta", señaló la organización en un escueto comunicado.

En un momento crucial para el presente y futuro de Armenia y su pueblo, día a día salen a la luz escandalosas revelaciones que involucran a las principales autoridades del país, a distintos ministerios u organismos de Estado, o a dirigentes o funcionarios extranjeros.

Recientemente, la Directora de la Oficina de la UNICEF en Ereván se fue del país "entre gallos y medianoche" luego de que públicamente fuera acusada de ser una espía de Azerbaiyán y Gran Bretaña.

Si bien desde la desintegración de la Unión Soviética y la restauración capitalista, los servicios de inteligencia occidentales comenzaron una nueva etapa y operan en el país sintiéndose "como en casa", ya sea a través de sus representaciones diplomáticas como de las cientos de organizaciones no gubernamentales, sectas religiosas y fundaciones de todo tipo que se establecieron en Armenia, sus intereses se convirtieron casi que en "política de Estado" a partir de la llegada al poder del tándem Nikol Pashinian-Armén Sarkisian (actuales primer ministro y presidente de la República de Armenia).

Y hoy, finalizada la guerra -con derrota y pérdida de parte de los históricos territorios de la República Autónoma de Nagorno Karabaj-, empieza a conocerse parte de la verdad. Es cierto, a cuentagotas y en medio de una profunda crisis política, económica y social, que no permite a muchos ver y comprender el momento crucial que se está viviendo.

La superación de la actual crisis y las garantías para la existencia misma de Armenia y para la seguridad de quienes la habitan, no dependen de la renuncia de Pashinian, ni de la realización de elecciones anticipadas o de la llegada al gobierno de la oposición, sino de un cambio profundo, de sistema, que vuelva a poner al país en la senda de la que fue sacada hace treinta años.