¿Por qué Armenia insiste en firmar cuanto antes un acuerdo de paz con Azerbaiyán?
Mientras Bakú le exige a Ereván una concesión tras otra, el gobierno de Pashinian parece mendigar la firma del denominado "acuerdo de paz" entre ambos países.

Por Adrián Lomlomdjian
Durante los últimos meses, en lo que hace a Armenia y a la situación en la región del Cáucaso, hay algunas cuestiones que se han transformado en constantes:
a) el anti-rusismo militante de las más altas autoridades de Armenia;
b) las acciones políticas y las declaraciones pro-occidentales de los principales funcionarios del Estado armenio, predominando entre ellas las pro-norteamericanas;
c) los innumerables -e incomprensibles- gestos de buena voluntad de Pashinian y sus socios para “congraciarse” con las autoridades fascistas de Turquía;
d) la insistencia del gobierno de Ereván para declarar oficialmente, a través de sus distintas autoridades y en cualquier rincón del planeta donde les pongan un micrófono, que “Armenia está dispuesta a firmar la paz con Azerbaiyán” de manera inmediata, por más que haya cuestiones que no estén consensuadas y por más que los azerbaiyanos, desde el presidente Aliyev para abajo, no dejan pasar un día sin realizar algunas declaración que destile su odio hacia los armenios.
Vayamos ahora a algunos ejemplos, que nos ayudarán a entender de lo que estamos hablando.
Durante su intervención en la 149ª Asamblea de la Unión Interparlamentaria, que se lleva a cabo en el Centro Internacional de Conferencias de Ginebra, Suiza, el presidente de la Asamblea Nacional de Armenia, Alén Simonian, aseguró que "Armenia y Azerbaiyán están a punto de llegar a un acuerdo para establecer la paz".
"Teniendo en cuenta el hecho de que el proceso de paz comenzó en serio hace varios meses, Azerbaiyán quería nuestro acuerdo sobre cinco puntos internacionalmente reconocidos (del tratado de paz). Me complace anunciar que hasta hoy hemos llegado a un acuerdo total sobre 16 puntos", aclaró Simonian, agregando que “el momento de la paz es ahora”.
"Invitamos a Azerbaiyán a mostrar voluntad política, aprovechar el momento y unirse a nosotros para hacer realidad lo posible. Armenia está dispuesta a firmar hoy un tratado de paz", enfatizó el líder parlamentario de Armenia ante los líderes del resto de los países participantes, entre ellos, la presidenta del Milli Majlis (Parlamento) de Azerbaiyán, Sakhiba Gafarova.
Cabe destacar que en Ginebra, el último lunes, estaba todo previsto para una reunión entre Simonian y Gafarova, pero la misma fue cancelada. Movsés Harutiunian, asistente del presidente del Parlamento armenio, escribió en su página de Facebook: “A último momento, la parte azerbaiyana abandonó el acuerdo previamente alcanzado”. Harutiunian agregó que al regresar a Ereván, Simonian dará explicaciones adicionales sobre los motivos de la cancelación de la reunión.
Unos días antes, en el marco del Foro de Sustentabilidad de Hamburgo, el presidente de Armenia, Vahagn Khachaturian, había expresado su esperanza de que Armenia y Azerbaiyán firmen el acuerdo de paz en las próximas cuatro semanas.
El mandatario armenio afirmó que Ereván espera que Bakú firme los artículos acordados antes de la Conferencia sobre Cambio Climático (COP29), que tendrá lugar en Bakú del 11 al 22 de noviembre. "Esperamos que tarde o temprano lleguemos a ese punto", dijo Khachaturian, agregando que aún se están negociando algunos artículos del proyecto de tratado de paz entre Armenia y Azerbaiyán.
Quien también insistió con la posición de “firmar el acuerdo de paz ya”, fue el diputado oficialista Sarkís Khandanian, presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Asamblea Nacional de Armenia, quien además brindó detalles de algunos pormenores hasta ahora desconocidos.
“Hasta donde yo sé, durante los contactos informales celebrados en Moscú los días 7 y 8 de octubre, Pashinian sugirió que Aliyev celebrara una reunión bilateral. Más precisamente, se propuso que se reunieran los ministros de Asuntos Exteriores y eligieran dos artículos ya acordados del Tratado de Paz, y luego los líderes firmaran el acuerdo antes de la Conferencia Internacional COP29 en Bakú. Para ser honesto, no estoy al tanto de la reacción de Azerbaiyán, pero espero que esta lógica pueda implementarse”, dijo Khandanian.

Estas declaraciones, Khandanian las realizó un día después de que el presidente Aliyev asegurara públicamente que fue la República de Armenia la que se negó a continuar las negociaciones sobre la Plataforma de Bruselas.
Para ser más preciso, Khandanian no tuvo inconvenientes en contar públicamente cómo el actual gobierno de Armenia se entregó a la imposiciones de Occidente. “Para obtener una respuesta a los dichos de Aliyev, basta con recurrir a los hechos. En junio de 2023, en el marco de la cumbre de la Comunidad Política Europea en Chisinau, tuvo lugar una reunión entre el presidente francés Macron y la canciller alemán Scholz, el presidente del Consejo de la Unión Europea, Michel, el presidente de Azerbaiyán, Aliyev, y el primer ministro de Armenia, Pashinian, como plataforma para resumir el debate en Bruselas. Se llegó a un acuerdo para celebrar la próxima reunión en este formato durante la cumbre de la Comunidad Política Europea, que se celebraría en Granada, España, en octubre del mismo año, después de una próxima reunión trilateral a concretarse en Bruselas”, dijo Khandanian, recordando también que la reunión trilateral tuvo lugar en Bruselas el 15 de julio de 2023 y que luego, Azerbaiyán se negó a participar en la reunión de Granada.
“Inmediatamente después de Granada, el presidente del Consejo de la Unión Europea, George Michel, dijo que a finales de octubre está prevista una reunión entre los líderes de Armenia y Azerbaiyán y que las partes ya han dado su consentimiento. Sin embargo, posteriormente la parte azerbaiyana rechazó también esta reunión. En una conversación telefónica entre Pashinian y Michel el 2 de febrero de 2024, este último propuso celebrar una reunión trilateral en Bruselas a principios de marzo de 2024. Se decidió realizar la reunión el 12 de marzo. Posteriormente, Azerbaiyán también rechazó esta reunión. En abril, Michel escribió una carta al Primer Ministro de Armenia y al Presidente de Azerbaiyán, proponiendo realizar una reunión trilateral en Bruselas. El primer ministro Pashinian dio su consentimiento, pero la parte azerbaiyana rechazó la reunión”, subrayó el diputado armenio.
Sarkís Khandanian también respondió a la afirmación de Azerbaiyán de que Armenia rechazó en julio la propuesta de una reunión en el marco de la Comunidad Política Europea, que se realizó en el Reino Unido. Dijo que Ereván no se negó, “pero no consideró apropiada una reunión en el nuevo formato”, es decir, con la mediación de los británicos, “e invitó a Bakú a celebrar una reunión bilateral en Londres”. El diputado armenio agregó que Bakú no sólo se negó a la reunión bilateral, sino también se había negado a una reunión con la participación de otros mediadores europeos.
Y mientras distintos actores protagónicos insisten desde Ereván en firmar el “Tratado de Paz” cuanto antes, desde la vecina Bakú no declaran en la misma sintonía.
En declaraciones realizadas esta semana, el presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, calificó de completamente irreal la propuesta del gobierno armenio de "firmar todo lo que ya se ha acordado y dejar los puntos no acordados para las etapas posteriores".
"La parte armenia presenta a menudo propuestas que supuestamente indican un deseo de paz, aunque sabe de antemano que no pueden ser aceptadas. Pese a ello, el proceso continúa", dijo el mandamás del régimen azerbaiyano, para quien "es importante seguir siendo pacientes, realistas y comprometidos para lograr la paz en el Cáucaso Meridional".
“El Primer Ministro de Armenia, Nikol Pashinian, ha demostrado una vez más su desprecio por las obligaciones de su país en materia de desbloqueo de las comunicaciones en la región”, dijo el secretario de prensa del Ministerio de Asuntos Exteriores de Azerbaiyán, Aykhan Hachizade, al comentar las declaraciones de Pashinian sobre los acuerdos trilaterales del 10 de noviembre de 2020.
Asimismo, el representante del Ministerio de Asuntos Exteriores azerbaiyano pidió una vez más que Armenia abandone los reclamos territoriales infundadas contra Azerbaiyán, deje de falsificar hechos históricos y cese las violaciones flagrantes de los principios del derecho internacional”.
Quizás, haciéndose cargo de la parte que le toca, pero al mismo tiempo tratando de "disimular" su rol de titiritero de los movimientos del gobierno liderado por Pashinian, el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, dijo que Estados Unidos nunca ha vinculado el tratado de paz entre Armenia y Azerbaiyán con la cumbre COP-29.
"Queríamos ver un tratado de paz entre Armenia y Azerbaiyán hace varios meses y presionamos para lograr un acuerdo de paz, esperando en última instancia que superara la línea. Pero eso depende de ambas partes, no de Estados Unidos", puntualizó Miller, durante la rueda de prensa del martes 15 de octubre.
No son pocos quienes creen que el gobierno de Armenia, como consecuencia de los compromisos asumidos con Occidente en su avanzada anti-rusa, desempeña hoy el papel de mendigo, ya que casi no queda lugar en el mundo donde algún funcionario del Estado armenio haya declarado que Ereván está dispuesto a firmar -sí o sí- el tratado de paz con Azerbaiyán. Y Bakú, lejos de dar su consentimiento, cada semana presenta una nueva exigencia.
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