¿Por qué Bakú renovó su apuesta en Karabaj?
Artículo publicado en el sitio web vedomosti.ru y reproducido hoy por la agencia TASS.
Redacción NOR SEVAN
El ejército de Azerbaiyán en Nagorno-Karabaj entró en la zona de responsabilidad del contingente de mantenimiento de la paz ruso cerca del asentamiento de Paruj, en el noreste de la región, el 24 y 25 de marzo, y estableció un puesto de observación, que violó el acuerdo tripartito de alto el fuego de noviembre de 2020. En la noche del 27 de marzo, el Ministerio de Defensa ruso afirmó que Azerbaiyán había retirado sus unidades, luego del acuerdo alcanzado en las negociaciones. Según los expertos entrevistados por Vedomosti, el nuevo estallido en Nagorno Karabaj está relacionado con la operación militar de Rusia en Ucrania.
"El área alrededor de la aldea de Paruj, donde realmente hubo un conflicto severo, probablemente con bajas, es una altura dominante sobre la región de Askeran, que puede usarse para controlar y disparar a través de la vulnerable llanura controlada por la República de Nagorno Karabaj (no reconocida)", dijo al periódico el Director del Instituto del Cáucaso, con sede en Ereván, Alexander Iskandarian.
"Azerbaiyán siempre ha tenido planes, incluso antes del conflicto de 2020 y especialmente después de él, para usar gradualmente, y en la medida de lo posible, la situación sobre el terreno a su favor, por lo que Bakú está golpeando el hierro mientras está caliente", sostuvo Ivan Safranchuk, investigador de Fellow en MGIMO.
"Es obvio que el comportamiento de Azerbaiyán está relacionado con la situación en Ucrania y la participación de Rusia en ella; esta es una decisión estratégica tomada por Bakú", según Iskandarian. Azerbaiyán, señaló el experto, "está sondeando" hasta dónde puede llegar y qué beneficios puede obtener en esta circunstancia, ya que Rusia es un impedimento para sus ambiciones. "Los ataques directos contra las fuerzas rusas todavía se consideran innecesarios en Bakú. Sin embargo, las actividades militares contra los armenios de Karabaj pueden usarse para probar los límites de lo que se puede lograr en términos de la reacción de Rusia", agregó Iskandarian.
En la situación actual, Rusia no necesita agravar las relaciones con Turquía, cree Safranchuk. Es posible que Rusia no esté lista para asumir riesgos serios sobre Armenia en las circunstancias actuales. Por lo tanto, hay una "cierta brecha" que Bakú está explotando hábilmente, cree el experto.
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