"Rusia es el único que puede frenar a Turquía en el Cáucaso Sur"
El académico Rubén Safratian y el politólogo Haik Yesayan reflexionaron sobre la situación actual y el rol fundamental de Rusia para el futuro de Armenia y Artsaj.
Redacción NOR SEVAN
El historiador Rubén Safrastian, turkólogo, orientalista y miembro de la Academia de Ciencias de Armenia, cree que "Azerbaiyán está perdiendo su independencia" y se está convirtiendo cada vez más "en una herramienta para implementar la política de Turquía en la región".
Según él, hace treinta años, con la desintegración de la Unión Soviética, Turquía se fijó un objetivo estratégico en la región. "El objetivo de Turquía en nuestra región es tomar el Cáucaso Sur bajo su control, convertirlo en una esfera de influencia geopolítica, y utiliza Azerbaiyán para esto. Estos objetivos se establecieron incluso cuando el partido de Erdogan no existía", puntualizó el experto en temas turcos.
Para Safrastian, tanto Armenia como Artsaj son un problema para Turquía en el camino de cumplir su objetivo, y "por eso todo está dirigido contra Artsaj, y luego contra Armenia".
Sin embargo, el académico sostiene que no es fácil para Turquía, porque "el sur del Cáucaso interesa en primer lugar a Rusia y, después, a Irán". Si bien dijo que "Rusia ha tenido una influencia única en nuestra región durante décadas", para él "esa influencia se está debilitando gradualmente, porque Rusia está ocupada con Ucrania" y "Turquía ahora está tratando de aprovecharlo". "Pero Rusia nunca aceptará ceder el Cáucaso Sur a Turquía, está fuera de discusión", enfatizó Safrastian, agregando que "por todos los medios posibles, Rusia intentará mantener la influencia que todavía tiene".
En cuanto a Irán, el profesor orientalista destacó el hecho de cómo Teherán activó su política regional a partir de la puesta en circulación -por parte de Azerbaiyán y Turquía- del proyecto denominado "Corredor de Zangezur" (que prevé quitarle el sur del país a Armenia), porque si Turquía y Azerbaiyán pueden tomar Siunik en sus manos, le estarían cortado a Irán la posibilidad de conectarse con Europa.
Rubén Safrastian llamó la atención sobre el hecho de que "Turquía es parte de Occidente, y es más beneficioso para Occidente que Turquía y no Rusia domine el sur del Cáucaso". Por eso, "debemos entender que por muy ocupada que esté Rusia, y en algunos casos no se comporte como nos gustaría, el único poder real en el sur del Cáucaso que puede protegernos, es Rusia, no hay otro poder que obstaculice a Turquía".
Por su parte, en una entrevista televisiva, Haik Yesayan se centró en la importancia del paso dado por Rusia.
"Recordarán cuando el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguey Lavrov, dijo en la conferencia del G20 que habían iniciado una operación militar forzada. En ese momento, los representantes de los países occidentales comenzaron a gritar descaradamente como adolescentes.
Los Estados Unidos asesinos y sus vasallos han bajado el nivel de las relaciones internacionales a un nivel más bajo que la Asamblea Nacional de la República de Armenia. Están tratando de silenciar la simple verdad con insolencia y ruido.
En este contexto, la declaración de la ex canciller alemana Angela Merkel fue muy interesante e importante. La dama dijo que el acuerdo de Minsk no se hizo para que la situación en el Este de Ucrania alcanzara una solución pacífica, sino para que Ucrania tuviera tiempo de prepararse entre 2014-2021. En otras palabras, la señora Merkel confirmó la tesis de las autoridades rusas de que al iniciar la operación militar especial impidieron la invasión de las tropas ucranianas con la ayuda de Occidente.
El presidente de Rusia aprendió correctamente las lecciones de su historia y no creyó en los líderes de mente pequeña de los países occidentales. Así, evitó la invasión de su país.
Hoy, Rusia ha iniciado una lucha de liberación contra el colonialismo occidental, y los países que tengan el coraje suficiente para rebelarse contra las costumbres occidentales opresivas, obtendrán el papel que les corresponde en el orden mundial que se está formando", sostuvo el politólogo armenio Haik Yesayan.
