Rusia fue y será garante de la existencia de Armenia y los armenios

En Rusia, critican a Pashinian por su retórica y accionar pro-occidental, pero también le piden a su gobierno mayor decisión a la hora de defender el Cáucaso.

Redacción NOR SEVAN

Oleg Osipov, asistente de Dmitry Medvedev, enfatizó que el vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia reafirmó, una vez más, que su país fue y será el garante de la existencia de Armenia. Pero también dejó en claro, que los traidores al pueblo armenio serán enviados al infierno junto a sus padrinos extranjeros.

Ayer, luego del ataque azerbaiyano sobre Karabaj, Medvedev, quien es quizás el político ruso de mayor peso luego del presidente Putin, escribió una publicación en las redes sociales haciendo mención a “un colega de un país hermano” que lo acusaba de haberlo abandonado, sin tener en cuenta, que fue él mismo quien perdió una guerra y trató de culpar de ello a Rusia; que también fue él quien renunció a parte de su territorio y otra vez le echó la culpa a Moscú; que fue él quien se alejó, coqueteó con la OTAN y mandó a su esposa a Kiev, a llevar galletas a la casa de los enemigos de Rusia”… Y Medvedev terminó su escrito con una pregunta retórica: “¿Adivinen qué destino le espera?”.

Osipov dijo que hoy habló con Dmitry Anatolyevich y si alguien no había entendido lo escrito por ayer, él se lo aclaraba: “Rusia ha sido y será la garante de la existencia misma de Armenia como Estado y de los armenios como nación. Así lo decidió el Supremo. Y todos los traidores nacionales al pueblo armenio serán enviado al infierno junto con sus patrocinadores extranjeros”.

Quien también se manifestó con firmeza fue el diputado ruso Konstantin Zatulin, primer vicepresidente del comité de integración euroasiática y relaciones con los compatriotas de la Comunidad de Estados Independientes (ex URSS), quien al hablar en vivo sobre la situación en Karabaj, durante la emisión de la audición radial "Habla Moscú", puntualizó que "Azerbaiyán dispara contra los armenios, pero toca a Moscú y Rusia".

Para Zatulin, a quien este año el gobierno de Pashinian le prohibió la entrada a Armenia, "el accionar azerbaiyano no sólo tiene como objetivo expulsar a los armenios de Nagorno Karabaj, sino también a Rusia del Cáucaso". "Esta es mi firme convicción", enfatizó.

Andrey Areshev, experto en el Cáucaso Meridional, habló de la situación existente en Artsaj y puntualizó que "inicialmente, el contingente ruso de mantenimiento de la paz y el ejército ruso hicieron todo lo que estuvo a su alcance para detener las hostilidades, iniciar negociaciones de paz y salvar vidas de civiles. Las actividades de las fuerzas de paz rusas merecen los mayores elogios". Y continuó: "En este contexto, resulta extraño escuchar algunas voces desde Ereván, que en las condiciones de total ausencia de parte del gobierno de Nikol Pashinian, deciden culpar a la parte rusa de todo lo malo que sucede".

El politólogo destacó también que "durante todo este tiempo, la parte rusa mantuvo negociaciones difíciles con Bakú, ya que actuó en condiciones limitadas, no sólo debido a la operación especial en curso en Ucrania, sino también a las acciones y declaraciones abiertamente destructivas de las actuales autoridades armenias".

Para Areshev, las relaciones ruso-armenias atraviesan una gran crisis, que ya dura bastante tiempo. Según él, "el verdadero rumbo de Nikol Pashinian y su gobierno fue precisamente el abandono de Nagorno Karabaj de una forma que les permitiera culpar de ello a Rusia" y "ahora estamos viendo la implementación de este escenario". Señaló que el gobierno ruso cometió errores y no está libre de pecados, pero cree que las fuerzas de paz rusas continuarán con sus esfuerzos en la medida de lo posible y en el marco de la implementación de los acuerdos alcanzados.

Explicó que las tendencias negativas en las relaciones armenio-rusas comenzaron hace bastante tiempo y que "no se trata sólo de declaraciones verbales de algunos políticos individuales, ante las cuales la parte rusa se ve obligada a reaccionar de una manera u otra, sino de que se están tomando medidas específicas que causan preocupación". Para él, la negativa de la parte armenia a desplegar una misión de vigilancia de la OTSC en la frontera hace un año y la posterior elección de permitir una misión de seguimiento europea, es una copia de la decisión tomada en su momento por el gobierno ucraniano. "Y sabemos qué hizo esta misión en Ucrania y cuáles fueron sus prioridades geopolíticas", subrayó Areshev, quien también mencionó los laboriotorios biológicos en Armenia controlados por los Estados Unidos, la ratificación por parte de Armenia del Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional y los recientes ejercicios militares armenio-estadounidenses.

"No creo que Rusia abandone la región. En el formato del mundo multipolar emergente y de las nuevas alianzas, su participación se mantendrá. Quizás adquiera algunos formatos nuevos, pero hay zonas tradicionales en las que no hay alternativa a la presencia rusa", sentenció Andrey Areshev.

Para el analista político ruso Sergey Markedonov, los dramáticos acontecimientos ocurridos en Artsaj en los últimos días significan una capitulación. Sostuvo que los logros y beneficios del tándem azerbaiyano-turco son evidentes, "pero el problema de las relaciones entre Armenia con Azerbaiyán y Turquía no termina en Karabaj". "Todavía queda Siunik, Gegharkunik, los enclaves, el problema de la demarcación fronteriza, el llamado Corredor de Zangezur... y Rusia e Irán aún no se han manifestado", agregó.

"Desde Armenia y el exterior hablarán de la derrota de Moscú, pero todavía Rusia no dijo su última palabra. El tratado de paz aún no se ha firmado. y todavía queda mucho por recorrer", señaló Markedonov.