"Rusia sigue comprometida con su alianza estratégica con Armenia"

El Viceministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Mijaíl Guluzin, brindó detalles de lo actuado por su país en Artsaj y como mediador entre Ereván y Bakú. Criticó la intromisión de Occidente, pero no descartó la posibilidad de cooperar con la Unión Europea y Estados Unidos para alcanzar la paz en el Cáucaso Sur, "siempre y cuando respeten los acordado entre Rusia y las partes en conflicto".

Redacción NOR SEVAN

Rusia parte de la necesidad de fortalecer los vínculos con Armenia, pero resulta desagradable ver los pasos dados por parte de Ereván, que están determinados por una lógica claramente opuesta. Así lo afirmó en una entrevista con la agencia de noticias rusa RBC el viceministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Mijaíl Galuzin .

"En primer lugar, quisiera señalar que la parte rusa siempre ha estado y sigue comprometida con la alianza y la asociación estratégica con Armenia, con los acuerdos existentes. Partimos de la necesidad de preservar y fortalecer esos estrechos y centenarios vínculos entre los pueblos ruso y armenio, que son muy importantes para ambos pueblos y países para su desarrollo. Por eso nos es aún más desagradable ver algunos pasos por parte del Ereván oficial, que, en nuestra opinión, están determinados por una lógica claramente opuesta a la que intenté explicarles", dijo el funcionario ruso.

Según el viceministro, hay una escalada de la retórica anti-rusa en las declaraciones de los funcionarios armenios y una intensificación de la campaña de información hostil en los medios de comunicación del país aliado. "Todo esto se basa en una narrativa absolutamente insostenible de que Rusia no ayudó a Armenia, que Rusia no protegió a la población armenia de Karabaj. Esta es una retórica propagandística superficial. Habría que profundizar en las causas subyacentes y los orígenes de los hechos ocurridos los días 19 y 20 de septiembre", puntualizó Galuzin.

El Viceministro de Asuntos Exteriores de Rusia recordó que el 9 de noviembre de 2020 los dirigentes firmaron una declaración tripartita que determinaba los enfoques y las modalidades del movimiento hacia una solución pacífica entre Azerbaiyán y Armenia, incluida la solución del problema de Karabaj. "Y junto con esas vías de normalización que mencioné anteriormente, también hubo un acuerdo de caballeros de que el estatus de Karabaj se determinaría en el futuro. Todos partieron de esto. Pero hace casi un año, se produjeron cambios significativos en este panorama. En Octubre de 2022, en la cumbre Armenia-Azerbaiyán bajo los auspicios de la Unión Europea, el primer ministro armenio Nikol Pashinian reconoció la integridad territorial de Azerbaiyán y la propiedad de Nagorno-Karabaj para Azerbaiyán”, enfatizó el viceministro ruso, subrayando que los dirigentes armenios que reconocieron a Nagorno-Karabaj como parte de Azerbaiyán, confirmaron este reconocimiento en mayo de 2023, en un evento similar Armenia-Azerbaiyán-UE. “Esto cambió radicalmente las condiciones bajo las cuales se firmó la declaración conjunta de noviembre de 2020 y la situación en torno al contingente ruso para el mantenimiento de la paz, establecido en Karabaj”, agregó.

Galuzin también destacó que en el momento en que los dirigentes armenios reconocieron a Karabaj como parte de Azerbaiyán, no se dijo ni una palabra sobre los derechos y la seguridad de los armenios que la habitaban. “Los documentos pertinentes publicados por la Unión Europea no dicen nada al respecto. La situación ha cambiado drásticamente y es muy extraño que se nos acuse a nosotros de no cumplir algo”, dijo acertadamente el Vicecanciller ruso, trayendo a la memoria que antes de eso, “Rusia y otros miembros de la OTSC manifestamos nuestra disposición a enviar una misión de observación a Armenia, pero lamentablemente recibimos una negativa de los máximos dirigentes armenios. En cambio, Ereván llamó a una misión de observación de la Unión Europea, que como demuestran los hechos, no desempeñó ningún papel estabilizador”.

A pesar de ello, Galuzin cree que “Rusia, la Unión Europea y los Estados Unidos pueden trabajar juntos para resolver las relaciones entre Armenia y Azerbaiyán”, pero para ello “deben reconocer y tener en cuenta los acuerdos y compromisos logrados gracias a la mediación de Moscú”. Igualmente reiteró que se ve con claridad que “la Unión Europea no está tan preocupada por el acuerdo, sino por expulsar a Rusia de la región”.

Al hablar sobre el tratado de paz armenio-azerbaiyano, el Vicecanciller ruso dijo que en el mismo deben quedar establecidos con claridad los derechos y la seguridad de los armenios de Nagorno-Karabaj, y los mecanismos que permitirán su implementación. “Partimos de la necesidad de establecer claramente en el tratado de paz el tema de garantizar derechos y seguridad confiables para la población armenia de Karabaj. Y al respecto, hemos presentado varias ideas a las partes. También necesitamos elaborar un mecanismo que permita la futura implementación del tratado de paz firmado. Debe ser un mecanismo que no dañe la soberanía y la independencia de Armenia y Azerbaiyán”, subrayó, agregando que “la preparación y firma de un tratado de paz fue una de las partes importantes de la hoja de ruta para resolver el conflicto entre Armenia y Azerbaiyán acordada por los líderes de Rusia, Azerbaiyán y Armenia”. Claro que, después, el primer ministro armenio decidió cambiar el rumbo a mitad de la travesía...

Mijaíl Galuzin dijo que Rusia estaba y sigue estando dispuesta a ayudar a Azerbaiyán y Armenia a elaborar un documento sobre una base mutuamente aceptable, que garantice una solución pacífica, estable, equilibrada y duradera. Opinó que a pesar de los últimos acontecimientos, la cuestión de Karabaj no finalizó y por ello “la presencia del contingente ruso para el mantenimiento de la paz en Nagorno-Karabaj sigue siendo necesaria”.