Día 17: En una de las batallas más duras de la guerra, Armenia resistió y venció
En dirección norte, la Defensa armenia fue inquebrantable ante los ataques de Azerbaiyán, que también bombardeó los poblados de Askeran, Martuní y Martakert. La Cancillería de Artsaj denunció que el Estado azerí no cumple con el cese al fuego firmado en Moscú. Además, se descubrió que las bombas sin explotar encontradas en Stepanakert son de fabricación turca e israelí.
Redacción NOR SEVAN
Durante la madrugada, la línea de contacto de Artsaj-Azerbaiyán se mantuvo con una tensión relativamente calma y sin cambios posicionales. Pese a eso, las fuerzas azeríes continuaron bombardeando los asentamientos civiles de Askeran, Martuní y Martakert violando, una vez más, el cese al fuego acordado en Moscú. No hubo víctimas ni heridos de estos ataques, pero apartamento se incendió en Martakert.
El Centro de Información Unificado de Armenia (CIUA) informó que, por la mañana, Azerbaiyán reanudó las operaciones militares acompañadas de fuego de artillería en casi toda la frontera con Artsaj en las direcciones sur, este y noreste pero el Ejército armenio mantuvo bajo control la situación y tomó las "medidas necesarias para detener el fuego y los planes del adversario".
El representante de la Defensa Armenia Artrsun Hovhannisian señaló que Azerbaiyán lanzó hoy un ataque a gran escala en la dirección norte, utilizando vehículos blindados. En su reporte diario nocturno, aseguró que se libraron una de las batallas más duras de la guerra en dirección norte y que la parte armenia logró que las fuerzas azeríes retrocedan, causando un daño significativo en sus filas. "El Ejército armenio demostró que es inquebrantable" exclamó Hovhannisian, que detalló que "Azerbaiyán no logró ninguna avance significativo".
"Hoy se libró uno de los combates más duros de esta guerra. Gracias a las acciones conjuntas, brillantes y heroicas de las Fuerzas Armadas, el Ejército Regular y las Fuerzas de Reserva logramos detener las operaciones ofensivas de Azerbaiyán", dijo Hovhannisian.
Mientras el Ministerio de Defensa azerí lanzó otra noticia falsa, donde acusó a Armenia de atacar al región de Tartar, que fue desmentida por la titular de la Defensa Armenia Shushan Stepanian; el vocero del presidente de Artsaj Vahram Poghossian reiteró su denuncia sobre la presencia de "miles de mercenarios terroristas" que participan en combates activos junto con unidades azerbaiyanas.
Por su parte, el Ministerio de Relaciones Exteriores de la República de Artsaj emitió una declaración sobre las constantes violaciones de la tregua humanitaria por parte de Azerbaiyán. "Continúa sus acciones agresivas y bombardeos en el territorio de la Artsaj, incluyendo ataques a la población pacífica y a los objetos civiles", expresó.
Aseguraron que el cese de las hostilidades no se cumple, porque Turquía no logró sus objetivos y no está interesada en establecer una paz duradera en la región. "Busca por todos los medios evitar la realización del acuerdo humanitario tregua con la mediación de la Federación Rusa", denunciaron en el comunicado.
Además, señalaron que el accionar de "Azerbaiyán, Turquía y los terroristas internacionales, se opone al establecimiento de la paz" y por ende "la comunidad internacional debe tomar decisiones importantes, incluyendo medidas coercitivas, para restaurar la paz en la región". "Un paso fundamental en esta dirección es el reconocimiento internacional de la independencia de la República de Artsaj" enfatizaron.
El Ejército de Defensa de Artsaj realizó una declaración sobre la guerra a gran escala desatada por el liderazgo político-militar de Azerbaiyán el 27 de septiembre. Denunciaron que las fuerzas azeríes continúan realizando varias "violaciones a los derechos humanitarios internacionales, las normas internacionales de derechos humanos y las normas y principios del derecho internacional".
"Con el fin de encubrir o justificar sus crímenes de guerra, así como de preparar terreno para lanzar nuevos ataques contra la población civil y pacífica, el liderazgo político militar de Azerbaiyán está recurriendo a una propaganda de desinformación, acusando falsamente no sólo el liderazgo militar-político de Artsaj, sino también las autoridades armenias", enfatizaron.
Por último, la Defensa de Artsaj sostuvo que está plenamente decidida a defender la seguridad de su patria y de su pueblo. "Responsabilizamos al liderazgo político militar de Azerbaiyán por sus crímenes de guerra y por convertir a nuestra región en un semillero de terrorismo internacional", cerraron.
Por otro lado, el presidente de Artsaj Arayik Harutiunian firmó un proyecto de ley aprobado por unanimidad por la Asamblea de Karabaj, que regula la participación de las milicias voluntarias en la defensa activa de la República. "La necesidad de la aprobación de la ley surge de la actual situación de guerra y apunta a fortalecer aún más la protección de nuestras fronteras junto con el Ejército de Defensa. Tanto Turquía como miles de terroristas mercenarios están participando en la guerra desatada contra nosotros por Azerbaiyán", subrayó Harutiunian.
"En este momento crucial de la guerra por nuestra patria, una vez más pido a nuestro pueblo que se una y haga todo lo posible para lograr la victoria final. La participación de cada individuo es crucial para romper la columna vertebral de Azerbaiyán y hacer que retrocedan más allá de nuestras fronteras", enfatizó el líder karabajtsí.
“Que nadie se equivoque, ¡Venceremos!, y aseguraremos un futuro para las próximas generaciones en paz y seguridad en nuestra patria", aseguró el presidente de Artsaj.
También hoy, el Servicio de Emergencias de la República de Artsaj reportó que, sólo en Stepanakert, se encontraron 673 misiles, granadas y bombas de racimo de fabricación israelí o turca. Cabe señalar que en Israel hubo un pedido para prohibir la venta de armas a Azerbaiyán, pero la Corte Suprema de dicho país no tomó la solicitud.
Desde el comienzo de las hostilidades, murieron 532 militares y 33 civiles armenios (31 en Artsaj y dos en Armenia). Por el lado azerí fallecieron 5.139 soldados y tuvieron más cinco mil heridos, informaron desde Armenia.
Según el Departamento de Rescate de Situaciones de Emergencia de Artsaj, más de cien personas fueron heridas por los ataques de Azerbaiyán. Más de 5.800 edificios residenciales, así como centros culturales y públicos, fueron dañados por los bombardeos.
Además, la Defensoría del Pueblo de Artsaj presentó un informe donde demostró que, desde la entrada en vigor del acuerdo de cese del fuego en Moscú se reportaron la muerte de al menos cinco civiles en Karabaj.
En la madrugada del 27 de septiembre, Azerbaiyán atacó nuevamente Artsaj. El Ejército azerí arremetió y avanzó sobre los territorios de Karabaj, bombardeando posiciones militares y civiles. Esto provocó la resistencia y reacción tanto de Artsaj como de Armenia y una escalada bélica en la región sin precedentes en las últimas dos décadas. En las Repúblicas de Armenia y Artsaj se declaró la ley marcial y la movilización general. Azerbaiyán, que cuenta con la complicidad político-militar de Turquía (un dron turco fue derribado en territorio armenio) y de Israel, decretó la ley marcial y el toque de queda en varias regiones de su país. Hay miles de muertos y heridos, y daños de todo tipo. El tres de octubre el Presidente de Artsaj tomó la decisión de ir al frente de batalla.
El 9 de octubre en Moscú con la mediación del canciller de Rusia, los Ministros de Relaciones Exteriores de Armenia y de Azerbaiyán acordaron un cese de hostilidades en la zona de conflicto de Karabaj a partir de las 12 del 10 de octubre (hora local). El cese al fuego fue con fines humanitarios para intercambiar prisioneros y cadáveres de acuerdo a los criterios de la Cruz Roja, pero este no es respetado por Azerbaiyán. Además, se acordaron parámetros concretos de cese de hostilidades y la inmutabilidad del formato de negociación.
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