Duras respuestas a los dichos de la Embajadora estadounidense en Ereván

Distintos sectores de las sociedades de Armenia y Artsaj, respondieron con fuertes críticas a los dichos de la embajadora Christina Quinn, quien afirmó que los armenios de Karabaj podrán sentirse seguros formando parte de Azerbaiyán.

por Adrián Lomlomdjian

En una entrevista concedida el lunes 3 de julio al Canal 1 de la TV Pública de Armenia, la embajadora de los Estados Unidos en Armenia, refiriéndose a las observaciones realizadas por los periodistas sobre la posibilidad de que los armenios de Artsaj sobrevivan como parte de Azerbaiyán, dijo: “Creemos y esperamos que sea posible. Y creemos que todas las partes deben hacer esfuerzos conjuntos para hacerlo posible. Los Estados Unidos creen que este es el enfoque correcto. Y alentamos a todas las partes a hacer esfuerzos conjuntos para garantizar dichos derechos y seguridad. También debo decir que todas las partes han dicho que creen que se deben garantizar los derechos y la seguridad de quienes viven en Nagorno-Karabaj".

En síntesis, la embajadora estadounidense Christina Quinn cree que "si Nagorno Karabaj es parte de Azerbaiyán, es posible garantizar la seguridad de la población armenia". Según ella, "ahora les queda a ellos encontrar la manera de hacerlo, de asegurarlo".

La jefa de la sede diplomática norteamericana en Ereván aseguró, que las negociaciones celebradas en Washington entre los cancilleres de Armenia y Azerbaiyán a fines de junio fueron constructivas. "Estados Unidos está comprometido a continuar apoyando estas negociaciones en un esfuerzo por lograr un resultado que traiga una paz duradera y justa a la región", dijo Quinn.

En respuesta a la observación de que en Artsaj otros cuatro militares armenios fueron asesinados por Azerbaiyán durante las negociaciones, Christina Quinn señaló: "Estados Unidos ha declarado claramente que el conflicto de larga data entre las partes no tiene solución militar. Hemos dicho claramente que los estallidos militares no son útiles para las negociaciones, y hemos pedido a todas las partes que superen sus diferencias a través de las negociaciones". Nada nuevo en la posición estadounidense, ni tampoco ninguna condena al sistemático accionar agresivo y criminal de Bakú.

“Cometió un gran error en lo que dijo, porque la declaración de la Embajadora de los Estados Unidos contradice radicalmente los principios adoptados por su país, al menos durante el período de la presidencia de Serzh Sarkisian, entre 2008 y 2018. Si la señora embajadora no lo sabe, permítame informarle que los presidentes estadounidenses, junto con los presidentes de Rusia Medvedev y Putin, y los de Francia, Sarkozy y Hollande, adoptaron cinco declaraciones escritas en donde se dejaba claro que el cumplimiento del derecho a la autodeterminación del pueblo de Nagorno Karabaj era obligatorio", declaró el actual vocero del Partido Republicano, Eduard Sharmazanov.

Sin embargo, el Vicepresidente de la Asamblea Nacional de Armenia dejó en claro, que "si Nikol Pashinian declaró que reconoce a Artsaj como parte de Azerbaiyán, ¿por qué debería la embajadora de Estados Unidos ser más armenia que Nikol?".

Artak Beglarian, asesor del Ministro de Estado de la República de Artsaj, acusó a la embajadora norteamericana de fomentar nuevos delitos y crímenes a través de declaraciones llenas de falsedades. "Está claro que no se pueden garantizar la seguridad ni los derechos del pueblo armenio bajo el gobierno dictatorial de Azerbaiyán", enfatizó el ex Defensor del Pueblo de Karabaj.

Beglarian saludó a la embajadora por el Día de la Independencia de los Estados Unidos, y le preguntó: "¿Por qué los estadounidenses no pudieron encontrar seguridad y derechos bajo el dominio colonial británico, a pesar de que compartían el mismo origen étnico y religioso, y si tendrían que encontrarlos los armenios con los azerbaiyanos, con quienes no comparten ni un mismo origen étnico ni tampoco religioso?".

"La embajadora de los Estados Unidos, que cree que los armenios de Karabaj pueden vivir seguros dentro de Azerbaiyán, no asumirá en el futuro ninguna responsabilidad por el genocidio de los armenios de Karabaj, ni tampoco por un nuevo genocidio de armenios en Armenia. La señora diplomática simplemente promueve los intereses de su país", dijo el politólogo Benjamín Matevosian.

Por su parte, el intelectual y político Karén Vrtanesian, no dudó en asegurar que "hay un acuerdo tácito entre Pashinian, Aliyev, Erdogan y los Estados Unidos, que no proviene de los legítimos intereses de los armenios de Artsaj".

El politólogo y ex candidato a presidente Andreas Jukassian, sostiene que "si analizamos las negociaciones de Washington desde el punto de vista de los intereses, el interés de Estados Unidos es que Armenia y Azerbaiyán acuerden desplegar tropas internacionales en Artsaj". Por eso, para el dirigente político liberal, "tanto Armenia como Azerbaiyán deberían decir qué quieren obtener a cambio para dar su consentimiento". Para Jukassian resulta "obvio que Estados Unidos está interesado en retirar las tropas rusas de Artsaj, cosa que ha dicho públicamente", por lo que se puede suponer que "este es el objetivo principal para los Estados Unidos". "En este momento, el resto de los temas que pueden ser importantes para Armenia, Artsaj o Azerbaiyán, no le interesan a los Estados Unidos, ellos sólo están interesados en retirar las tropas rusas de Artsaj", puntualizó.

La situación en Artsaj

Haciendo mención a la situación actual en Artsaj, el diario armenio Aravot escribe en su editorial del 4 de julio, que "incluso en Occidente aceptan que solo los rusos pueden garantizar una paz real en en el territorio", agregando que "las autoridades de Armenia no entiendan o no quieran entender este simple mensaje de Occidente".

Según el editorialista, la situación se vuelve cada día más delicada porque: "a) las autoridades armenias cometen un grave error tras otro y complican cada vez más la ya difícil situación existente; b) Aliyev aprovecha los "errores" del lado armenio; y c) la oposición parlamentaria de Armenia se encuentra en un estado de desorganización tal, que no logró convertirse en una alternativa institucional con la pudieran dialogar tanto los rusos como Occidente, para salir del estancamiento creado por las actuales autoridades".