Estados Unidos reconoció la existencia de sus laboratorios en Ucrania
Ayer, la Subsecretaria de Estado confirmó lo denunciado por Rusia el sábado pasado. Resta saber qué se hizo con el material peligroso acumulado en esos laboratorios.
Redacción NOR SEVAN
El sábado pasado, 5 de marzo, el Ministerio de Defensa de Rusia denunció que, según documentos hallados tras la operación especial militar en defensa del Donbas, se descubrió que en Ucrania se han venido desarrollando componentes de armas biológicas con financiamiento de los Estados Unidos. El vocero del ministerio, Ígor Konashénkov, destacó que el Gobierno de Kiev intentó deshacerse de las pruebas emitiendo una orden de destrucción de emergencia el pasado 24 de febrero.
Mientras tanto, los medios masivos de comunicación siguieron con el guion preestablecido y las 24 horas de cada día continuaron con sus informes sesgadamente pro-occidentales y rusofóbicos, presentándonos como “verdades absolutas” muchas historias que son simples libretos elaborados en alguno de los laboratorios que el poder dominante a escala mundial tiene para seguir controlando a la opinión pública a través de alimentar ininterrumpidamente, incluso con mentiras y falsedades, “el sentido común” acorde a la defensa de sus estrechos intereses.
Casi nadie hizo mención a esta noticia, que debería haber prendido la alarma de los pueblos y gobiernos, ya que según el mismo Konashénkov, “Rusia recibió documentación de que se trabajaba con patógenos altamente peligrosos como peste, ántrax, tularemia, cólera y otras enfermedades mortales”.
Incluso hubo quienes, fieles a mantener la dicotomía Rusia/mala-Occidente/bueno, aseguraban que se trataba de una mentira rusa para desviar la atención y otro tipo de barbaridades. Son los mismos medios y periodistas que casi ni hablan de los grupos fascistas que desde hace casi una década dominan el panorama político en Ucrania, que si bien son minoritarios, están en el poder y gozan del apadrinamiento y financiamiento de los Estados Unidos y varios países europeos.
"Desde los empleados de los biolaboratorios ucranianos se recibió la documentación sobre la destrucción de emergencia el 24 de febrero de patógenos especialmente peligrosos de la peste, ántrax, cólera y otras enfermedades mortales", destacó la vocera del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, María Zajharova, el pasado domingo, mientras las autoridades rusas daban a conocer algunos de los documentos que confirmaban la “destrucción” realizada el pasado 24 de febrero. Sin embargo, casi nadie a nivel mundial se hacía eco ni pedía explicaciones al respecto.
Pasaron los días y fue China, a través de su Ministerio de Relaciones Exteriores, quien ayer, martes 8 de marzo, exigió a los Estados Unidos “revelar detalles sobre los laboratorios biológicos financiados en Ucrania”. El vocero de la Cancillería china, Lijian Zhao, sostuvo que EE.UU. debe ofrecer detalles, incluidos sobre los tipos de virus almacenados y las investigaciones realizadas.
“Estados Unidos tiene 336 laboratorios en 30 países bajo su control, incluidos 26 solo en Ucrania. Debe dar cuenta completa de sus actividades militares biológicas en el país y en el extranjero y someterse a verificación multilateral”, subrayó el funcionario chino.
En las páginas de NOR SEVAN publicamos varias notas respecto a los laboratorios que Estados Unidos mantenía bajo su control en Armenia y otras repúblicas exsoviéticas, y el peligro que eso significa para los mencionados países y pueblos, ya que lo que se hacía y hace allí “es secreto de Estado” para el gobierno norteamericano. ( ver https://www.norsevan.com/post/estados-unidos-y-sus-laboratorios-en-armenia y https://www.norsevan.com/post/amistades-peligrosas )
Finalmente, el martes 8 de marzo, la subsecretaria de Estado norteamericana Victoria Nuland reconoció la existencia de los laboratorios de investigación biológica en Ucrania y la participación de Estados Unidos en el control de los mismos. Claro que como lo hacen siempre, intentan revertir la carga de la prueba.
En una audiencia ante el Comité de Relaciones Exteriores del Senado, la funcionaria refutó las acusaciones de Moscú y las calificó como una “clásica técnica rusa para culpar a otros por lo que planean hacer ellos mismos”, dijo la subsecretaria de Estado de EEUU, Victoria Nuland, asegurando que “Kiev y Washington estaban trabajando ahora para evitar que el material acumulado allí cayera en manos de las fuerzas rusas”...
Desde Moscú, declararon hoy que “seguramente, todo el mundo está interesado en comprender y descubrir de qué se ocupaban estas instituciones”.
“¿Cómo se destruyó todo? ¿De verdad se destruyó todo?", preguntó la funcionaria rusa María Zakharova, agregando otros interrogantes: “¿Y cómo se puede verificar la destrucción de los materiales biológicos? ¿No habrán caído en manos de los nacionalistas y extremistas?”.
La vocera de la Cancillería de Rusia recordó que durante muchos años, al frente del Ministerio de Salud ucraniano, estuvo un “maravilloso médico” proveniente “del continente americano”. “Aquí está la respuesta a la pregunta de quién, cómo y con qué fines administraba la salud pública en Ucrania”, enfatizó María Zakharova.
